Acrílico sobre lienzo 70X60
Detrás de la ventana del Hotel Florida en Callao escribía Hemingway en Madrid ,1937, un momento muy trágico para España , La Guerra civil , vino como corresponsal para el North American News paper Alliance.
Con tan solo 24 años y habiéndose recorrido el antiguo continente en busca de historias, Hemingway escribía sobre un viaje que había hecho a Madrid con la intención de ver su primera corrida de toros. Según narraba el escritor americano, había pedido a un amigo que le dibujara un mapa de España en la parte posterior de la carta de un restaurante y, con aquel plano improvisado, el joven reportero tomó un tren en París a primera hora de la mañana para llegar a la capital española a las pocas horas.
Hemingway quedó maravillado con los encantos que ofrecía Madrid desde el primer momento: por su excelente clima, su extraordinaria ubicación, por el Museo del Prado, el Parque del Retiro y, sobre todo, por el carácter de sus gentes, con las que acabaría estrechando fuertes lazos hasta llegar a ser conocido por todos como “don Ernesto”.
Desde la habitación del Hotel Florida (Hoy en día El Cote Inglés de Callao)escribió numerosas crónicas . El 14 de abril de 1937 contaba:
«La ventana de la habitación del hotel está abierta y escucho tendido en la cama el tiroteo que llega hasta mí desde la línea del frente situado siete manzanas más allá. El fuego de fusilería continúa toda la noche y se mezcla con ráfagas de ametralladora pesada y disparos de mortero. Al escucharlo, causa placer estar acostado y retirar poco a poco las piernas para calentar los pies, y no en el frente de Carabanchel o de la Ciudad Universitaria. De la calle llegan la voz recia de un hombre que canta y la de tres borrachos que discuten cuando empiezo a quedarme dormido».
Aquí encontraría la inspiración necesaria para escribir algunas de las obras que le llevarían a ser considerado como unos de los escritores más importantes de la literatura universal. En el final de su novela Fiesta, sus protagonistas se reúnen en el bar del Hotel Palace y, agradecidos por la gentileza del servicio, contemplan el paisaje veraniego que transcurre detrás de las ventanas.
Aficionado a la caza y amante del riesgo, fueron ingredientes necesarios para seducir al aventurero escritor y tener una relación muy estrecha con Nuestra gente, costumbres y folclore. Hizo una gran amistad con el torero Luis Miguel Dominguín.
Gracias Por enamorarte de MAdrid y escribir:
«Madrid rebosa literatura, poesía y música por sus cuatro costados, tanto, que ella misma es un personaje literario».
Y de todas tus frases, me permito elegir y practicar ésta:
«Vive la vida plena de la mente, exaltado por nuevas ideas, intoxicado por el romance de lo inusual».